jueves, 24 de abril de 2014

POSTRE DE FRESAS


 
Volver de vacaciones siempre es duro. Por eso, mejor endulzar el regreso para que no se haga tan cuesta arriba. Por cierto, en Málaga todo ha lucido en estos días, no sólo los tronos. Su clima, ese privilegio, ha permitido disfrutar de la playa, de sus calles, paseos y  chiringuitos a malagueños y visitantes. 

Ingredientes:
½ k. Fresas
4 Galletas o pastas crujientes
Un puñado de nueces
150 gr. Mascarpone
70 gr. Azúcar glas
Ralladura de una lima
Cacao en polvo 

Preparación:
Se limpian las fresas (reservando algunas para decorar) y se cortan en cuartos. Se mezclan con la ralladura de una lima.
Con ayuda de una varilla, se bate el mascarpone con el azúcar hasta obtener una crema homogénea.
Se parten las galletas en trocitos pequeños, sin llegar a triturarlas, y se pone en la base de cada una de las copas o vasos. Se añaden las nueces partidas. A continuación se ponen las fresas y, por último, la crema de queso mascarpone con azúcar. Para decorar, se espolvorea cacao en polvo con ayuda de un colador fino y se colocan unos gajos de fresas. 

Consejos:
Es importante que las galletas o pastas se mantengan crujientes. Por eso, pongo las nueces como barrera, para evitar que les llegue la humedad de las fresas. Es importante también montar las copas sin apretar las capas.
La ralladura de lima se puede sustituir por otro cítrico o, bien, prescindir de ella.

viernes, 11 de abril de 2014

VIGILIA MENOS PENOSA


 
Desde luego este plato no es mejor que los tradicionales de vigilia, solo se trata de una propuesta para salir un poco de la rutina, sin perder la esencia. Lo de “menos penosa” va por el  marisco.  

Ingredientes:
½ k. Garbanzos
150 gr. Bacalao salado en un trozo
3 Dientes de ajo
1 Cebolla
1 Tomate maduro pequeño rallado
1 Hoja de laurel
Cominos
Pimentón dulce
8 Almendras crudas
1 Rebanada de pan del día anterior
Aceite de oliva virgen extra
16 Gambas
1 Huevo
Harina
Panko (pan rallado japonés)
Sal
Pimienta 

Preparación:

Para hacer esta receta hay que tener dos precauciones previas: Desalar el bacalao y poner los garbanzos en remojo la noche antes en agua templada con un poco de sal y en cantidad suficiente para cubrirlos en todo momento.
Para preparar el plato lo primero que hay que hacer es cocer los garbanzos, ya que esto lleva bastante tiempo (una hora y media aproximadamente). Para ello, se echan en una cacerola con agua hirviendo y se añade una cebolla pelada y entera, dos dientes de ajo y una hoja de laurel.
Cuando lleven un rato, se corta el bacalao desalado en trozos y  se añade a la olla con  los garbanzos.
Se pelan las gambas dejando la cola (conservando las cáscaras), se salan y se reservan. En una sartén, se pone un poco de aceite y se doran las cáscaras de las gambas, machacando las cabezas para que salga todo el jugo. Cuando ya están, se añade el tomate rallado para levantar toda la sustancia que han soltado. Una vez ha frito un poco, se agrega una cucharadita de pimentón y rápidamente un cucharón de agua de donde están haciéndose los garbanzos. Se deja hervir un par de minutos, se cuela y se añade al potaje.
Por otro lado, se pone en una sartén pequeña un chorro de aceite y, cuando está bien caliente, se fríe la rebanada de pan. Se saca y se reserva. En ese  aceite se doran las almendras y un diente de ajo. En el vaso de la batidora se ponen las almendras, el ajo, el pan frito, unos granos de comino y un poco de caldo de la cocción de los garbanzos,  y se tritura todo. Se echa a la olla principal y se deja cocer hasta que los garbanzos están tiernos. Cuando casi están listos, se comprueba el punto de sal y se echa un poco de pimienta recién molida.
En el momento de servir, se hacen las gambas. Para ello, hay que pasarlas por harina, huevo batido, panko, y repetir el proceso por huevo y panko. Se fríen en abundante aceite caliente y se escurren en un plato con  papel absorbente.

Consejos:

Para conseguir un caldo más ligado, en vez de añadir harina, se trituran unos cuantos garbanzos de los que están cociendo y dará más espesor.
Asimismo, se puede añadir el pimentón picante en vez de dulce o una guindilla.
En cuanto al panko, da un crujiente muy especial, pero se puede usar la clásica gabardina, fritura en harina sin más, o cocinarlas a la plancha.
Por supuesto, la gamba también puede ser sustituida por langostino, gambón, carabinero…etc. Lo que el gusto o el bolsillo permita.

viernes, 4 de abril de 2014

ALCACHOFAS CONFITADAS EN MICROONDAS CON HUEVO Y PIÑONES


Me encantan las alcachofas, pero hasta hace unos meses no había encontrado una receta en la que el ingrediente principal sea esta exquisita verdura y que no fuera una elaboración engorrosa, ya que de por sí, limpiarlas es un proceso pesado. Aprovechando un estupendo artilugio con el que cuento para cocinar al microondas, di con esta forma de preparación que me tiene enamorada. Eso sí, la calidad de las alcachofas o alcauciles (como se les dice en parte de Andalucía) y la frescura de los huevos es fundamental.
 

Ingredientes 

12 Alcachofas de Tudela 

Aceite de oliva virgen extra 

Un puñadito de piñones 

4 Huevos camperos
 
Sal
 

Preparación 

En un bol o recipiente apto para el microondas se pone una cantidad  de aceite de oliva que permita cubrir las alcachofas. A medida que éstas se van limpiando y, cortadas en cuartos, se ponen dentro del aceite. Para confitarlas en el horno microondas es necesario unos diez minutos a potencia media, pero es conveniente sacarlas a los cinco minutos, moverlas y comprobar el punto de cocción.

Mientras tanto, se doran los piñones en una sartén pequeña con una cucharada de aceite y se reservan. 

Para escalfar los huevos con garantía, la técnica del papel film es muy adecuada. Basta cortar un trozo de este papel transparente de unos 15 cmts.  y colocarlo sobre un cuenco pequeño o taza. No debe quedar tirante, ya que hay que verter el huevo en el interior. Para que éste no se pegue al papel film es preciso pintarlo con unas gotas de aceite. A continuación, se  casca el huevo y se añade una pizca de sal. Se retira el papel film con cuidado sujetándolo por los extremos del papel, se enrolla sobre sí mismo para que no quede aire y se ata con una hilo de cocina, una tira fina de papel transparente, o haciéndole un nudo.
 
Mientras se repite esta operación con los demás huevos, se pone a hervir abundante agua en un cazo. Cuando está en ebullición, se ponen los huevos en sus envoltorios y se cuecen durante tres minutos, de modo que la clara quede cuajada y la yema liquida.

A la hora de servir, se coloca cada ración de alcachofas escurridas de aceite, sobre ellas un huevo por comensal y, por último, se añaden los piñones tostados.
 

Consejos 

También se pueden escalfar los huevos de forma tradicional con agua salada y un chorrito de vinagre. En este caso, es conveniente no mantener el fuego muy alto para que la clara vaya envolviendo a la yema y queden más bonitos y jugosos.  

La técnica del papel film permite además condimentar y agregar al huevo lo que más nos guste: pimienta, trufa, jamón picado, gambas, etc.
 

Si metemos las alcachofas en el aceite a medida que las vamos limpiando y cortando, éstas no se ponen oscuras ni es necesario recurrir al limón o perejil para evitar la oxidación. 

En cuanto al aceite sobrante de confitar las alcachofas, no hay que desecharlo; al contrario, no solo nos servirá mas veces para esta preparación, además, tendremos un aceite aromatizado especialmente apto para guisos, menestras… Lo que si es necesario es colarlo bien antes de guardarlo.